Por Otilia Kusmin

Nuestra parrilla de siempre, es posible transformarla en más versátil.  Un herrero puede fabricarnos una asadera de hierro, con algo de marco para poder contener eventuales jugos. De esta forma tendremos 3 lugares de cocción: grilla, asadera y brasas, con sus cenizas incandescentes. Manos a la obra.

Brasas

En el famoso restaurante parrilla de la ciudad de Bogotá, ANDRÉS CARNE DE RES  disfruté y me enseñaron a hacer el LOMO al TRAPO.

Muy simple:  un trapo nuevo y limpio, tela de algodón y sin tintura es lo mejor. Mojar bien el género, repartir una  cantidad adecuada y no excesiva de sal gruesa. Limpiar un lomo de ternera o novillo, es importante que quede todo el tramo de la carne de similar grosor. Envolver con la tela mojada y atar bien con hilo de algodón. Enterrar en las brasas y cocinar unos 25 a 30 minutos por kilo de carne, según el punto deseado.  Dejar descansar los jugos y abrir. Pruébenlo, ideal para acompañar con guarniciones como, deliciosas arepas de maíz fresco, combinadas con ensaladas de hojas.

Mientras se cocina el lomo, podemos aprovechar las brasas, colocando 2 cabezas de ajo envueltas en papel metálico. Lograremos exprimiendo las cabezas en media hora, un delicioso puré ahumado de ajo, para aderezar cualquier vinagreta. También es posible enterrar 2 o 3 naranjas de piel gruesa, girarlas de vez en cuando. No solo perfuman el ambiente, calentitas son deliciosas para comer al postre, en los días aún frescos de esta primavera que no se quiere ir, aquí en el hemisferio sur.

A la chapa

Fui de los primeros autores que publicaron Pizza a la Parrilla, era el año 1992, fue mi segundo libro COCINA SABROSA editado con Editorial Albatros, más adelante se llamó COCINA SALADA haciendo juego con COCINA DULCE como opción, bajo el mismo editor  en  Ediciones Turísticas.  Hoy agotados en librerías.

Es muy simple hacerla, comenzamos por una buena masa de pizza, harina 000 o 0000, 500 g de harina, 10 g de sal, 20 g de levadura fresca activada como siempre con una cucharadita de azúcar y agua tibia. Aproximadamente 250 c.c. de agua y 50 c.c. de aceite de girasol. Amasar bien hasta que se separe de las manos.

Dejar duplicar y estirar de unos 2 cm de espesor y procurando una forma circular. Extender sobre la chapa cuando hace piso, dar vuelta, pasar a la parrilla para liberar espacio y distribuir unas cucharadas de salsa de tomates mejor casera, 500 g de queso mozzarella en láminas, anillos de cebolla bien finos, provenzal con o sin picante según gusto y fuego tranquilo hasta fundir el queso. En este momento conviene tapar con una chapa para condensar calor.

Matambre a la leche

Proveerse de una asadera proporcionada a su tamaño, verter medio litro de leche entera, no poner sal. Tapar y luego de 2 horas cubrir con abundante queso rallado. Cortar en cuadritos, disponer palillos largos y ofrecer de picada.

A la Parrilla

Pollo Relleno

Hacerse amigo de un pollero, y pedirle que lo deshuese en forma de bolsa, lo podemos hacer nosotros, es un poco complejo, pero se logra.

Untarse las manos de un poco de aceite, jugo de limón, sal, ají molido, orégano y pimienta.  Rellenar con ¼ kilo de mozzarella, 100 g de jamón cocido natural o paleta de 1ª. Marca, unas hojas de laurel, briznas de romero, láminas de ajo fresco, 200 g de tomate en láminas. Cerrar con palillos e hilo de algodón los dos extremos para lograr no se escape el queso. Cocinar sobre la parrilla a fuego tranquilo 30 a 40 minutos de cada lado, según el tamaño del pollo.  

Bananas a la parrilla con helado

Limpiar muy bien un sector de la parrilla, colocar las bananas pasadas por azúcar, cocinar  vuelta y vuelta, en menos de 10 minutos estarán, acompañar con helado.

Preparemos ricas ensaladas, dulces y saladas, que siempre acompañan y enriquecen todas las opciones, alrededor de nuestra parrilla.

Buen apetito

@otiliakusmin

Loading