El director es oriundo del barrio de Villa Crespo

Transcribimos el comentario del diario “La Nación” sobre la película “Claudia”, dirigida por Sebastián De Caro, oriundo de Villa Crespo. Dolores Fonzi es la protagonista principal del film que se estrenó el pasado jueves. Claudia: una boda tan ácida como negra Claudia (Argentina/2019) Dirección y guión: Sebastián De Caro. Fotografía: Mariano Suárez. Edición: Flor Efrón. Elenco: Dolores Fonzi, Laura Paredes, Julieta Cayetina, Julián Kartun, Paula Baldini, Gastón Cocchiarale, Jorge Prado. Distribuidora: Aura Films. Duración: 89 minutos. Calificación: apta para todo público con reservas. Nuestra opinión: buena Claudia es lo que hoy en día se denomina wedding planner, o sea, aquellas personas encargadas de la organización de casamientos y de otras celebraciones donde subyacen el encuentro y la emoción. Pero en Claudia la emoción está ausente merced al cálculo matizado con una sonrisa amplia y plena de impostación. Nada debe fallar en el juego del ritual que organiza, hasta que recibe el pedido de auxilio de una colega, a quien debe sustituir en una boda de gran despliegue e importancia, para el que decide cambiar el lugar de la ceremonia. Así, sin quererlo, desencadena una serie de conflictos que pueden complicar la celebración y hasta su trabajo mismo. De su arte, en el que no estará ausente la magia que los invitados aceptan en este tipo de celebraciones (ya sea como espectáculo o evasión) dependerá salvar su dignidad cuando todo zozobre. Sebastián De Caro cambia con su argumento el lugar convencional de las películas de bodas, en muchos casos resueltas lisa y llanamente al juego de comedias de enredos, trasladándose a una zona mucho más comprometida y exigente donde la complejidad se pone de manifiesto en ese tono ácido y negro que tiene Claudia, la película, y Dolores Fonzi como su admirable, y fundamental protagonista. El elenco acompaña ese rol vital sin desentonar y la fotografía cambia la paleta cuando por fuera de todo el color se esconde lo macabro del disfrazado ritual vacío de sentido. Fuente y Foto: La Nación

Loading