Los vecinos denuncian que los recitales casi diarios alteraron la vida cotidiana del barrio. Sostienen que el gobierno porteño se niega a escucharlos. Y anunciaron que recurrirán a la Justicia. Quejas vecinales y corte de calles por el megaestadio del diario La Nación. Fuente: Página 12 (Por Santiago Brunetto)
Link a nota original: https://www.pagina12.com.ar/507268-protesta-en-villa-crespo-por-el-caos-que-genera-el-movistar-
Vecinos y vecinas del barrio de Villa Crespo realizaron este lunes un corte de calle para reclamar respuestas al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) ante los reiterados “ruidos molestos, concentración de personas, cortes de calles y caos de tránsito” generados por los recitales masivos en el estadio Movistar Arena, ubicado en ese barrio y propiedad del diario La Nación. Denuncian que en los últimos meses los eventos se volvieron diarios y que no hay controles por parte del GCBA, por lo que proponen un tope semanal de recitales. Además, adelantaron a este diario que evalúan llevar el caso a la Justicia.
“Después de tener 90 recitales en el último semestre decidimos efectuar un corte de calle para hacernos oír y reclamarle a las autoridades del GCBA que nos escuchen”, dijo a Página 12 Gustavo Perrone, de “Vecinos Autoconvocados contra el Megaestadio”, la organización que surgió para intentar impedir la construcción del recinto para recitales en el predio lindero al estadio de Atlanta. La protesta de los vecinos y vecinas de Villa Crespo se realizó este lunes desde las 19.30 con un corte de calle en las inmediaciones del Movistar Arena, en Corrientes y Dorrego.
La organización enumeró algunos de los problemas que sufren día a día con los reiterados eventos: “Ruidos que se originan a la entrada y salida, concentraciones de personas desde tan temprano que dificultan el paso en las veredas, contaminación lumínica permanente que proviene de los carteles del megaestadio, cortes de calle que impiden el tránsito de quienes viven en la zona y genera además caos de tránsito, saturación de estacionamientos como así también autos estacionados sobre las veredas”, advirtieron.
Perrone agregó, además, que con los recurrentes eventos se producen “problemas de vibraciones” que afectan a la estructura de los edificios cercanos. El vecino sostuvo también que luego de los recitales el lugar queda “lleno de suciedad” con una “invasión del espacio público, falta de baños químicos y uso de alcohol en las inmediaciones y en frente del estadio cuando en los espectáculos masivos eso no se puede hacer”. Además, los vecinos y vecinas remarcaron que la problemática se recrudece para aquellas personas con movilidad reducida: “Quedan ‘presos’ en sus propias casas debido a que, por los cortes de calle y las vallas, ni ellos pueden salir ni sus familiares llegar a buscarlos con un auto particular o un taxi”, aseguraron.
Desde la agrupación destacaron que el objetivo de la protesta es que el GCBA genere un ámbito de diálogo para buscar soluciones a las problemáticas que denuncian. “Queremos una mesa de trabajo para que cesen todos los disturbios y problemas que padecemos”, señalaron y propusieron también un “tope de recitales semanales”. Hace tres años, los vecinos y vecinas presentaron un proyecto en la Legislatura para que se cambie el uso del Movistar Arena solo a “eventos deportivos”, pero la iniciativa nunca fue tratada.
En el comunicado recordaron también que “este megaestadio de más de 25 mil metros cuadrados, con capacidad para 16 mil personas, se construyó en tierras públicas cedidas por la Legislatura Porteña al Club Atlanta que, a su vez, lo cedió en comodato al diario La Nación”. En 2017 la Legislatura porteña aprobó con los votos del oficialismo la modificación del proyecto original que en un principio autorizaba al club a construir un polideportivo. Con la modificación quedó habilitada la construcción del “microestadio” privado. Además, se aprobó una exención de pagar ABL durante 40 años.
El estadio también es propiedad de la multinacional AEG WordWide y los vecinos y vecinas reclamaron “que se le retire la exención de pago del impuesto”. “El resto de los habitantes de CABA pagamos este impuesto que se incrementa mensualmente al ritmo de la inflación”, subrayaron. Perrone adelantó ahora que, de no obtener respuestas a los reclamos, las protestas continuarán y podrían llevar las denuncias a la Justicia a través de una acción de amparo.
Foto: Página 12 (De Enrique García Medina)
