El lunes 3 de junio se llevó a cabo la quinta edición de estas marchas
El lunes 3 de junio por la tarde, por quinta vez se hizo en distintos puntos de la Argentina la marcha “Ni una menos”, para exigir terminar con los femicidios y travesticidios y a la vez continuar luchando por el aborto legal, seguro y gratuito y en contra de todo tipo de violencia económica. En esta ocasión, el documento de “Ni una menos”, buscó “visibilizar a las mujeres indígenas, originarias, afroargentinas y negras en pos de empezar a saldar la deuda histórica con ellas y todas las identidades vulneradas por el capitalismo patriarcal y el modelo económico de Macri”. En la masiva marcha que se hizo desde Congreso hasta Plaza de Mayo hubo distintas intervenciones y estuvo repleto de carteles y banderas de protesta y glitter verde. Se representaron los 1193 femicidios que existieron desde la primera marcha de “Ni una menos”, el 3 de junio de 2015, lo que significó que 1.182 ninxs queden huérfanos. Se pusieron pares de zapatos de las víctimas y cada par representaba a una de las asesinadas. Lamentablemente las cifras de femicidios no han bajado. En el documento leído durante esta marcha se pidió por la libertad de distintas presas políticas: Patricia Cabana, Mirtha Guerrero, Mirta Aizama, Gladis Díaz, María Condorí, Milagro Sala y la absolución de “Higui” de Jesús. “Estamos acá para decir basta de violencia económica, sexista, racista y clasista contra las mujeres, lesbianas, travestis, trans, bisexuales, no binaries, gordes e intersex; de la clase trabajadora; ocupades, desocupades, precarizades, piqueteres y de la economía popular”, se dijo en el masivo acto. La legisladora porteña Myriam Bregman (Partido de los Trabajadores Socialistas en el Frente de Izquierda y de los Trabajadores), desde la cabecera de la marcha declaró al diario Página 12: “Hay que seguir acompañando a las pibas que salieron el 28 (de mayo) a pedir que se apruebe el proyecto de ley de aborto legal, porque ya no podemos seguir esperando”. Y continuó con: “Así como nunca se pudo unir esclavistas con esclavizadores, opresores y oprimidos, no puede haber ninguna comunidad entre pañuelos celestes y verdes”. Pidió además “seguir en la calle, peleando juntas, para que de una vez por todas dejemos de tener una bota sobre nuestras cabezas y hay que decirle basta porque las que mueren siempre son las más pobres; por eso que no nos digan, en nombre de la pobreza, que tenemos que esperar”. Caracteres: 2.390
