El joven mediocampista es pretendido por tres selecciones y se convirtió en una pieza importante para Diego Dabove en Argentinos Juniors

Fuente y Foto: InfoBae. Titulo original: Matko Miljevic, el hijo de la crisis del 2001 por el que se pelean las selecciones de Argentina, Croacia y Estados Unidos (reducido por caracteres de espacio de título en esta web). A fines de los 90 y a principio de los 2000, Argentina se encontraba al borde de la explosión. El pueblo vivió una de las peores crisis económicas y sociales de su historia reciente, lo que provocó que varias familias se marchasen a distintas partes del planeta en búsqueda de un futuro mejor. Este fue el caso de los Miljevic, quienes emigraron a Miami en la antesala del colapso que desencadenó en la llamada crisis del 2001. Muertes en las calles, estado de sitio, saqueos y un presidente abandonando la Casa de Gobierno en helicóptero fue el saldo de ese fatídico diciembre. En Estados Unidos, en un contexto totalmente diferente, el 9 de mayo nació Matko Miljevic, la nueva esperanza de Argentinos Juniors. “Acá había un poco de lío y mis padres se fueron allá por poco más de un año, para que tenga la nacionalidad”, expresó el enganche en diálogo con Infobae. Aunque rápidamente, entre risas, aclaró: “Soy más porteño que yankee”. Su vínculo con el fútbol inició de manera algo fortuita, ya que su padre no le veía talento con la pelota en sus pies. “En mi casa estaba haciendo una obra y todo el día me la pasaba jugando, ¡hasta con los albañiles! Uno de ellos también trabajaba como entrenador en un club de barrio de Lanús llamado 12 de octubre. Él le dijo a mi papá (Gustavo) que era bueno para mi edad, que me llevara a las prácticas; pero mi papá decía que no era para mí el fútbol”, recordó. Ese obrero era Juan Carlos Castillo (más conocido como Vaquita), quien hoy es uno de los principales reclutadores de jóvenes talentos que tiene el Club Atlético Lanús. “Arranqué con Vaquita, él fue el que me descubrió y me formó. Yo tenía solamente 4 ó 5 años”, afirmó. Su desembarco de Boca al Bicho de La Paternal también fue gracias a una reconocida persona dentro del fútbol juvenil: Fernando Bocha Batista, actual entrenador de la selección argentina Sub 20 y Sub 23. “Yo jugaba en preinfantiles para Boca. En un partido contra Argentinos anduve muy bien y el coordinador, que en ese momento era Batista, hizo lo imposible para que me pase. Habló con mis padres y los convenció. Hace 12 años que ya estoy acá”, rememoró. Fino, elegante, y con una larga cabellera, su fama trascendió las fronteras del mundo juvenil. Luego de ser el goleador de su división, un argentino con llegada a la Federación de Fútbol de los Estados Unidos (USSF) les notificó del talento que se les estaba escapando. “Me llamaron un 3 de enero para que en febrero entrenase con ellos durante un torneo que iban a disputar en Argentina y luego un certamen en Montpellier, Francia”, comentó el futbolista que puede desempeñarse como enlace o volante por izquierda. “Fue una experiencia única, a todo jugador le gusta. Fue un sueño hecho realidad”, agregó. Aunque la última vez que defendió los colores de The Stars and Stripes fue en 2016, ante Francia, el interés no mermó. “Seguimos en contacto. Hace tres semanas me pidieron que vaya a entrenar allá, pero como estoy teniendo minutos con el plantel profesional Argentinos no me dejó. Pero me gustaría”, aclaró. El Team USA quería que se sumara a una serie de entrenamientos con la Sub 20, pero el equipo de La Paternal se negó ya que Matko es uno de los principales relevos de Diego Dabove. Estados Unidos no fue el único interesado en quedarse con esta “joya”. Hace unos meses participó del clásico torneo La Alcúdia con la selección argentina, donde brilló y se ganó un lugar dentro del 11 ideal. “Matko Miljevic, el encargado de canalizar el juego de la albiceleste. El ‘10’ de origen estadounidense asumió responsabilidades con unas cualidades innatas. No se ha privado de usar ni uno de sus recursos. Su habilidad, unida a la facilidad para el regate y una visión de juego exquisita, le han hecho merecedor de este puesto”, lo describió la organización del evento. El joven sostiene que aún no tomó una decisión con respecto a su futuro, aunque reconoció que hace pocas semanas mantuvo una charla con el Bocha Batista, el entrenador a cargo de diagramar el plantel que irá a los Juegos Olímpicos de Tokyo en búsqueda de una medalla. Pero la pelea por su presencia no es entre dos países, sino entre tres. Debido a que su abuelo es de descendencia balcánica, la Federación Croata de Fútbol también comenzó a jugar sus cartas. “Hace unos días llamaron a un allegado, pero ya se habían contactado antes, hace como dos semanas. Dijeron que me seguían de cerca, no solo la Selección, también un club de Croacia”, confesó. “Lo tomo con tranquilidad todo esto, trato de mejorar día a día. En el futuro se verá. Yo lo disfruto al máximo, estoy muy contento”, esbozó con una sonrisa en su rostro el habilidoso mediocampista que realizó su primera pretemporada con la Primera División de la mano de Alfredo Berti y que tuvo su bautismo oficial el 26 de mayo de 2019 ante Boca Juniors por un encuentro correspondiente a la Copa de la Superliga. Su primer gol en la máxima categoría del fútbol argentino, aunque fue con algo de fortuna, tampoco se hizo esperar. “Se me dio por suerte, y de local. Cuando la pelota entró me acordé de cuando era chiquito, de mi familia… Vi cómo festejaban los hinchas, fue algo soñado”, relató. Aunque el Bicho mira de reojo la tabla de los promedios, esto a Miljevic no lo incomoda. “Cuando entro trato de hacer lo mejor para que los hinchas se queden satisfechos y poder ayudar al equipo. El entrenador me pide que juegue tranquilo, con personalidad, como lo hago en las prácticas”, manifestó el joven enganche que tiene como espejo a su ex compañero Alexis Mac Allister, hoy en Boca Juniors. Renato Corsi, nacido en Nueva York, fue el primer estadounidense en brillar con la remera de Argentinos, al proclamarse campeón de la Copa Libertadores. En la actualidad también se encuentran los hermanos Alan (Independiente) y Joel (Arsenal) Soñora disputando la actual Superliga; pero Matko, con su talento y la pelota debajo de la suela de sus botines, se apunta a hacer su propio camino. “Mi sueño es jugar en un Mundial y, por qué no, ser un jugador de élite, jugar en Europa”. Esas palabras suenan ambiciosas, pero hoy parece ser una cuestión de tiempo para que se cumplan. Todo dependerá de él, el éxito estaría al alcance de su mano. Caracteres: 6.178

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