El 22 de septiembre de 2022 falleció a los 97 años Carlos Salim Balaá Boglich, más conocido como Carlitos Balá. En su homenaje –en una fecha cercana al aniversario de su nacimiento, que fue el 13 de agosto de 1925- se colocaron 2 placas en la casa de su infancia, en Olleros al 3900

Rodeado de familiares, admiradores y vecinos del barrio, se llevó a cabo el sábado 26 de agosto un acto para la colocación de dos placas conmemorativas por parte de la Comuna 15 del Gobierno de la Ciudad (una en la fachada y otra en la vereda), en su casa natal, ubicada en Olleros al 3900, barrio de Chacarita. Se trató de un trabajo conjunto entre la comuna y vecinos, familiares y amigos del popular artista. En el evento también se repasó el legado de Balá, en compañía de familiares, amigos, vecinos y personalidades del espectáculo, para recordarlo y celebrarlo.

Placa dedicada a Cariltos Balá en la vereda de su casa de Olleros al 3900

“Carlitos Balá fue uno de los máximos creadores del refranero popular, protagonista de la historia grande del humor nacional e ídolo de las infancias de generaciones de argentinos por más de 50 años. Con talento, valores, humor sano y solidaridad, construyó más que una exitosa carrera. Logró quedarse en el corazón de un país y hacernos mejores personas”, se indicaba en la convocatoria al evento, difundida por el equipo de Prensa y Comunicación de la Comuna 15.

En el acto se encontraron presentes el Presidente de la Comuna 15 Martín Garcilazo y los comuneros Natasha Semmartin , Juan Pablo Alegre y Victoria Pujolle (todos de Juntos por el Cambio) y Pablo García, de Prensa de Comuna 15, que fue el presentador en el evento.

Placa dedicada a Carlitos Balá en la fachada de su casa de Olleros al 3900

Martha Venturiello, la viuda de Carlitos Balá, acompañada por sus dos hijos y sus nietos, se mostró muy emocionada y alegre en el acto. También concurrieron al acto los periodistas Juan Butvilofsky y Javier Fabracci, el humorista Jorge “Carna” Crivelli y admiradores e imitadores de Balá.

Se trató de un simple pero emotivo homenaje, rodeado de afectos y seres queridos, en uno de los barrios que más apreciaba Carlitos por estar vinculado a su casa natal y su infancia.

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