Por Ezequiel Semo. Publicada en el Periódico Voces de la Comuna 15
El sábado 22 de julio de 2017 junto a Ricardo Boyan participamos del evento por el 113 aniversario del barrio La Paternal, realizado en la mítica cinco esquinas/ plaza Raymundo Gleyzer. Nuestra acción consistió en repintar en el lugar uno de los tres carteles originales de la estación (los habíamos rescatado en 2015 con la Agrupación Boletos Tipo Edmondson cuando fueron descartados por la empresa). Mientras estábamos en plena faena de lijas, cepillo de alambre, polvo y los vapores del esmalte sintético y aguarrás, escucho el dialogo cercano entre un grupo de mujeres que mencionaban la importancia afectiva de la estación y una de ellas dijo: “Mi zeide siempre me llevaba a pasear a la estación La Paternal”. Mi oreja y corazón se sincronizaron al escuchar ese relato que mencionaba a la estación condimentado con una palabra tan familiar como “zeide” y que significa abuelo en idish. Así es que dejé los pinceles y encaré a quien había hecho esa referencia. Ella era María Pinco, vecina del barrio. Me contó la historia de su abuelo, lo importante que era este espacio ferroviario en su vida ya que cuando con sus hermanos venían desde Versalles a visitar a sus abuelos maternos su abuelo los llevaba de paseo desde su casa (donde hoy vive María) a la estación y agregando a lo emotivo del relato que aún conservaba un carnet abono mensual ferroviario que perteneció a su zeide.
Agendamos nuestros números telefónicos y María me envío esa misma noche, al whtasapp, las fotos del carnet. Realmente no lo podía creer. Nunca había visto un abono ferroviario del Ferrocarril Pacifico o San Martín con boleto emitido para viajar desde La Paternal.
Nos juntamos algunos días después, yo quería tener la posibilidad de ver físicamente aquel objeto y para tremenda sorpresa me regaló esa tan preciada pieza.
Pero, ¿qué es un abono mensual ferroviario?, ¿para qué servía? y ¿cómo está compuesto?
A diferencia de un boleto de ida, que servía para un solo viaje o dos, en el caso del ida y vuelta, el abono mensual permitía al abonado viajar ilimitadamente entre las dos estaciones para las que era adquirido.
Además de resultar más económico al mes, el abono permitía evitar colas en las boleterías para adquirir un boleto cada vez que se viajaba, optimizando el tiempo al acceder más rápido a los trenes o a no perderlos por esperar en las congestionadas ventanillas de boleterías.
Elías (León) Lewinsky, el zeide de María, era el usuario del carnet abono en cuestión. Era peletero y usaba todos los días de la semana el tren para ir a trabajar a una peletería ubicada en el centro porteño. Desde su casa en Cucha Cucha y M.R. Trelles iba a la estación y desde La Paternal hasta Retiro volviendo de Retiro hasta La Paternal.
El carnet mide 6.5 X 9 cm y 0.4 cm de espesor, fue expedido durante la administración del Ferrocarril Buenos Aires Al Pacifico (vemos arriba la sigla “B.A.P.”) mientras que el boleto fue emitido en febrero de 1953, ya bajo la administración del estatal Ferrocarril Nacional General San Martín. A nivel gráfico vemos la convivencia y pervivencia de materiales que hacen referencia a dos momentos históricos de nuestros ferrocarriles: la administración británica, previa a la nacionalización de1947/ 1948, y la presencia del Nacional San Martín, producto de esa estatización. Con su boleto, pesa 38 gramos.
El número de abonado de Lewinsky era el 02159. Lo vemos impreso en negro en el carnet y en rojo sobre la foto y el boleto. Estas tres partes que forman el abono mensual tendrían que contener el mismo número: esto evitará posibles fraudes que pudieran perjudicar a la empresa mediante intercambio de boletos y fotografías. (Como leer un abono, por Patricio Larrambebere en el Instagram de la Agrupación Boletos Tipo Edmondson –ABTE- 10/03/2022)
El color azul o verde del carnet indica que sirve exclusivamente para viajar en los coches de segunda clase (el color rojo del carnet indicaba primera clase). Esta identificación cromática tenía una función práctica: hacer más ágil la visualización, más fácil la identificación y por ende lograr un efectivo control por parte de los guarda trenes e inspectores, personal encargado de fiscalizar los “boletos pases y abonos”.
En cuanto al boleto, su color verde también cumplía una función. Según El rescate de una época: los boletos del Ferrocarril Nacional General San Martín de Pablo López Coda también escrito por Patricio Larrambebere: “Los colores de fondo de los boletos para abonos mensuales iban cambiando por año y mes para evitar usos indebidos o reutilizaciones (…)”.
Los boletos para abono mensual del B.A.P y del San Martín tenían ciertas particularidades. La más característica era que uno de sus laterales numerados era seccionado (el derecho, como vemos en la foto). Esta “circuncisión boleteril” cumplía una función administrativa, quedando el fragmento numerado como control en la estación para terminar en la oficina de contaduría. Otra característica exclusiva de estos pasajes es la grilla de pequeños doce números (del 1 al 12) que vemos impresa en “L” recostada. El número marcado en la grilla corresponde al mes de emisión del boleto (en este caso 2). Otro recurso de control para evitar el fraude.
Sabemos con seguridad por el número 0005 que hubo otros cuatro boletos abono con el mismo destino, valido para viajar entre La Paternal y Retiro.
Por último, en el reverso del carnet, además de figurar el nombre del usuario aparece una serie de disposiciones y normas que la empresa, de una forma imperativa y con lenguaje punitivo, hace saber. Transcribimos la totalidad en uno de los epígrafes de una de las fotos que acompaña esta nota, pero citamos aquí, para despedirnos, la última oración de aquel texto:
“Para la renovación del abono es indispensable la entrega del que corresponde al mes vencido sin el cual este carnet no tiene validez”.
Por eso, ante nosotros, está el último boleto que Elías (León) utilizó con su carnet abono. Emitido en febrero de 1953, ni más ni menos que setenta años atrás.
León Lewinsky nació en el año 1900 en Suwalki Polonia. Se escapa a América como desertor del ejército. Ingresa al país desde el Uruguay con el pasaporte de su hermano Elías, es así que quedó inscripto oficialmente como Elías. Estaba casado con Yenia Titiewzka y tuvieron dos hijas: Emilia y Sara. Si bien era peletero en el verano trabajaba de “pintor fino” realizando con plantillas de bronce guardas decorativas y símil papel (Estarcido- stencil).
En los años 30´se asentaron junto a otras dos familias en una casa chorizo en La Paternal, calle Cucha Cucha al 2600, casi M.R. Trelles. Fue uno de los fundadores y miembro de la Comisión Directiva de la escuela Israelita hebrea de La Paternal (desde el año 1939 llamada Tel Aviv N° 1), ubicada en la calle Alte. F. J. Segui 2130. Falleció en 1966. Sus restos descansan en el cementerio israelita de Tablada.
Para todos los mencionados en este párrafo Z”L, que su memoria sea bendita.
Agradecimiento: A María Pinco por su generosidad y confianza. a Patricio Larrambebere, artista plástico, fundador de la Agrupación Boletos Tipo Edmondson (ABTE) y referente a la hora de leer, analizar y reflexionar sobre los boletos edmondson en Argentina. Por último, a Teodoro R. Puebla que trabajó como guarda tren en el FCG. San Martín entre los años 1964 – 2005, fuente de consulta por su conocimiento en el oficio de fiscalizar PASES, BOLETOS Y ABONOS.
Ezequiel Semo es artista visual e investigador. Trabaja en el Centro de difusión e información sobre el judaísmo argentino Marc Turkow de AMIA. Accionó quince años en el proyecto artístico ABTE -Agrupación Boletos Tipo Edmondson-. Es fundador del Archivo Textil Ferroviario. Lo encuentran en las redes: Ezequiel Semo en FB e IG y No demuelan la estación La paternal en FB.
Contacto: ezequielsemo@gmail.com
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Transcripción de foto de portada (esa versión no incluye la última oración que sí está en la foto de abajo):
El boleto abono visto de ambos lados. Y el reverso del carnet. Además de contar con el nombre del usuario hay una serie de disposiciones y normas que la empresa, de una forma imperativa y punitiva, hace saber. Transcribimos:
Este carnet es otorgado sujeto a las condiciones publicadas por la empresa en la solicitud respectiva. El boleto de abono está sujeto a las condiciones publicadas en las tarifas oficiales.
El carnet con el abono debe ser entregados cada vez que el guarda tren u otro empleado autorizado se lo solicite, en su defecto el pasajero abonará el importe del viaje a tarifa ordinaria.
El abono es INTRANSFERIBLE. Si otra persona pretendiera utilizarlo para viajar, será secuestrado y anulado por los agentes de la Empresa, perdiendo el interesado todo derecho al mismo salvo que pruebe la falta de culpa o dolo. En cuanto a aquel que utilice indebidamente el abono, será perseguido como defraudador de la Empresa. Para la renovación del abono es indispensable la entrega del que corresponde al mes vencido sin el cual este carnet no tiene validez.
